¡Que emoción tenerte de nuevo por aquí! El día de hoy quería escribirte acerca de cómo puedes evitar desanimarte y seguir adelante con cualquier cosa que te propongas. Algo que he vivido y he visto que personas a mi alrededor experimentan es que comienzan con mucha motivación cuando toman la decisión de tomar acción y lograr lo que se han propuesto, ese sueño que está en su interior.
Pero ¿qué nos pasa (a casi a todos) poco después de ese boost de energía? Muchas veces vamos con todas las ganas, toda la motivación, todo el espíritu ganador y los primeros días estamos imparables. Pero luego llega ese día en el que no cumplimos lo que teníamos que hacer, tal vez no nos levantamos con el pie derecho o no sentimos la energía o ganas de darle para adelante hacia nuestro objetivo. Y eso automáticamente nos desanima, nos hace sentir que tal vez no tenemos las características que hacen especiales a quienes sí lo logran, y nos paraliza evitando que avancemos…
Esto que te acabo de contar es MUY COMÚN, entonces no te sientas mal por ello. A muchísimas personas nos ocurre. Muchísimas. Sobre todo cuando vas comenzando, cuando apenas vas despegando y necesitas un empujón diario, porque cuando ya llevas suficiente tiempo tomando acción y dando todo de ti, se vuelve un hábito hacerlo… Pero ¿qué hacer cuando después de tomar la decisión y andar motivadx, llega un día “no tan bueno” que hace que piense que tal vez no tengo lo que se requiere?
Aquí te van 5 tips que impactarán tus resultados:
- Recuerda que eres humano. No eres un robot que va a estar trabajando el mismo ritmo de manera igual todos los días. Hay días con más inspiración, más energía y otros con menos. Aprovecha los auges de energía e inspiración para hacer cosas increíbles y en los días con menos, sólo avanza, aunque sea a pequeños pasos.
- Ve cada uno de los días como una nueva oportunidad de comenzar. Si la semana pasada, o el día de ayer no cumpliste con tus compromisos, no te agobies por favor. Cada día es un nuevo comienzo, no te ates al pasado, enfócate en el día de hoy tómalo como una oportunidad nueva.
- Haz que cada día valga la pena, sin importar si no cumpliste alguna meta. Si te propusiste despertar temprano y no lo hiciste, no te angusties pensando que tu día valió “queso”. Si no te despertaste temprano, haz que todos y cada uno de los siguientes movimientos valgan la pena. Pon todas tus ganas y energía en hacer que tu día sean memorable.
- Escribe por las mañanas los avances que hiciste el día anterior. Cada mañana escribe los avances del día anterior en tu libreta. Escribe cada cosa que hiciste que te hizo sentir orgullo y cada tarea lograda. Esto es un consejo de Robin Sharma, el autor de El Monje que Vendió su Ferrari, y te cuenta que es importante hacerlo para que desde que inicia el día sientas motivación y orgullo por tu esfuerzo, y hagas que ese nuevo día sea igual o mejor que el anterior.
- Celebra tus logros. DEBO de hacer énfasis en una de las cosas que más impacto ha tenido en mi vida: celebrar mis logros. Para empezar es una manera de demostrarte tu amor propio, y además hace que sientas aún más el avance que estás haciendo en tu vida. Haz cosas especiales y celebra todo lo que para ti sea importante.
Espero que te haya encantado este blog porque creí que era justo y necesario jajaja.